Falsos positivos en VIH mientras estás en PrEP: Lo que necesitas saber antes de entrar en pánico

Recibir un resultado «positivo» en una prueba de VIH puede ser una experiencia angustiante, especialmente si estás tomando PrEP de forma constante y adherente. En algunos seguimientos clínicos de rutina, personas en PrEP han recibido resultados preliminarmente reactivos, que luego han sido descartados con nuevas pruebas confirmatorias. Aunque esto puede generar una ola de preocupación, la realidad es que tiene explicación, y no significa necesariamente que hayas adquirido el virus.

Las pruebas actuales de VIH son extremadamente sensibles. Eso es bueno porque nos permite detectar infecciones muy tempranas, pero también tiene una desventaja: esa sensibilidad puede causar reacciones cruzadas y falsos positivos en ciertas circunstancias. Hay varias razones por las cuales una prueba puede resultar reactiva incluso sin que exista una infección. Entre ellas están las respuestas inmunológicas provocadas por vacunas recientes o enfermedades virales, el uso prolongado de PrEP que puede alterar ciertas respuestas del sistema inmune, o incluso variaciones técnicas en los algoritmos de las pruebas de laboratorio.

En muchos sistemas clínicos, cuando una prueba da un resultado repetidamente reactivo, se repite con otro método que busca confirmar o descartar el diagnóstico. Si esa segunda prueba es negativa, la persona se considera no infectada. En casos más complejos o de alta preocupación, se realiza una prueba molecular que detecta directamente el RNA del VIH. Si esa prueba muestra niveles indetectables, se concluye que no hay infección activa.

Es fundamental comprender que un resultado preliminar reactivo no equivale a un diagnóstico. Un diagnóstico requiere confirmación con pruebas específicas. Por eso, si recibes un resultado reactivo, lo primero es mantener la calma y seguir el protocolo médico. Muchas veces, lo que parece una noticia devastadora termina siendo un error técnico o una reacción transitoria del cuerpo.

Ahora bien, hay una pregunta que muchas personas hacen y que merece una respuesta directa: ¿cómo es posible que una persona en PrEP tenga un resultado reactivo? ¿No se supone que la PrEP impide el ingreso del virus?

La respuesta corta es esta: sí, el virus puede ingresar al cuerpo incluso si estás tomando PrEP, pero eso no significa que te hayas infectado. La PrEP no es un muro que bloquea físicamente la entrada del VIH. No funciona como un condón. El virus puede entrar, pero una vez dentro, los medicamentos que tomas evitan que se replique. Es decir, el virus no logra instalarse ni multiplicarse, y por tanto, no logra establecer la infección. Esto se conoce como una infección abortiva. El cuerpo elimina al virus antes de que cause daño, gracias a que la PrEP interfiere con su capacidad de replicación. Sin embargo, esa breve exposición puede ser suficiente para que una prueba muy sensible detecte algo y lo marque como reactivo.

Entonces, un resultado reactivo no significa que la PrEP haya fallado. Tampoco significa que estés infectado. Lo que realmente confirma o descarta la infección es la prueba molecular. Si esta prueba sale negativa o indetectable, puedes quedarte tranquilo.

En estos casos, la información es tu mejor herramienta. Evita entrar en pánico. No tomes decisiones apresuradas. No suspendas la PrEP por tu cuenta. Y sobre todo, no permitas que el miedo nuble tu juicio. Sigue las indicaciones del equipo médico que te atiende. Ellos sabrán qué pasos seguir.

Para los profesionales de salud, es clave informar desde el inicio sobre esta posibilidad, aunque poco común. Explicar que la PrEP protege, pero no impide el ingreso del virus, ayuda a preparar emocionalmente a los pacientes y evita reacciones desproporcionadas. También es importante no generar alarma innecesaria ni sobremedicalizar con pruebas excesivas sin justificación.

Un caso clínico publicado por la revista Open Forum Infectious Diseases documenta exactamente este fenómeno en una persona en PrEP que tuvo múltiples resultados falsos positivos, todos finalmente descartados. No fue el único. Casos similares han sido reportados por la ASM en 2024. La ciencia ya lo reconoce, ahora necesitamos que la comunidad también lo entienda.

En la era del PrEP, no todos los resultados positivos significan infección. La medicina es poderosa, pero no infalible. Lo importante es actuar con información, sin dejarse llevar por el miedo. Un resultado reactivo no es una sentencia. Es el inicio de un proceso diagnóstico que debe seguirse con calma, con claridad y con apoyo. La diferencia entre el pánico y la paz está en la información.

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